La deforestación, degradación y perturbaciones generalizadas provocaron que los bosques tropicales emitan ahora más carbono a la atmósfera de lo que capturan de esta, alerta la Universidad estadounidense de Boston.
01 octubre 2017 |
Las mediciones anteriores de la pérdida de carbono forestal se concentraron en lo esencial en áreas deforestadas parcial o completamente.
Ahora, los científicos han sido capaces incluso de explicar los cambios de las sutiles pérdidas naturales y humanas (degradación y perturbación) como la tala de árboles a pequeña escala y la mortalidad; también midieron las ganancias por el crecimiento del bosque.
Las conclusiones de un equipo de científicos del 'Woods Hole Research Center' y la Universidad de Boston añaden una nueva urgencia a la necesidad crítica de realizar agresivos esfuerzos a nivel global para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y cumplir así con los objetivos climáticos del Acuerdo de París.
El estudio sugiere que existe una ventana de oportunidad crítica para revertir la tendencia en las emisiones deteniendo la deforestación y restaurando activamente los bosques en tierras degradadas.