Un nuevo estudio reveló que el alto consumo de café contribuye a la reducción de la probabilidad de desarrollar demencia y a retrasar el deterioro cognitivo.
08 octubre 2016 |
Un grupo de 6.467 mujeres de avanzada edad informó a los expertos de su consumo diario de cafeína. Así se descubrió que aquellas que consumían más de 261 miligramos por día —equivalente a dos tazas de café— mostraron una reducción del 36% en el riesgo de desarrollarla.
"La creciente evidencia del consumo de la cafeína como un factor protector contra el deterioro cognitivo es muy interesante", indicó la líder del estudio y profesora de psicología, Ira Driscoll.
Además, la experta añadió que la cafeína es un producto alimentario fácil de adaptar para casi cualquier dieta, debido a que tiene pocas contraindicaciones.
Los especialistas destacaron la singularidad del estudio y "la oportunidad sin precedentes de examinar a lo largo de 10 años la relación entre el consumo de la cafeína y la incidencia de la demencia" en un grupo grande y bien definido de mujeres postmenopáusicas.
Así, durante 10 años, 388 de las mujeres recibieron un diagnóstico de demencia potencial u otras forma del deterioro cognitivo. Las que consumieron una cantidad de cafeína superior al indicador promedio, resultaron menos propensas a desarrollar demencia en el futuro.
No obstante, Driscoll destacó que el estudio no es una comprobación definitiva de la interconexión directa entre el consumo de la cafeína y la probabilidad de sufrir deterioro cognitivo, pero es un paso más en cuantificar la relación entre los dos.