ndefensos están los productores panameños de leche, ante la decisión de la transnacional Coca-Cola FEMSA de reducir en 18 mil litros diarios la compra del producto por excesos de inventarios, según su subsidiaria Estrella Azul.
26 marzo 2018 |
La decisión, aplicada a 170 proveedores locales, provocó la reacción de Eduardo Carles, ministro de Agricultura y Desarrollo Agropecuario (MIDA), quien en una misiva a directivos de la corporación señaló que 'no acepta y condena la medida de recorte anunciada' y pidió suspenderla de 'manera inmediata'.
El titular dijo que 'a todas luces la empresa busca implementar medidas coercitivas con acciones a corto plazo', lo que actúa contra la estabilidad del sector, y resaltó que es un 'uso innecesario y abrupto de su posición de poder, como único comprador'.
Por su parte, la Asociación de Productores de Ganado Lechero rechazó el recorte y afirmó que todas las fincas entregarán su producción completa al comprador, a partir de que fueron incentivados por el mismo para incrementarla y amenazaron con demandas ante la justicia por daños ocasionados.
Estrella Azul tiene el 45 por ciento del mercado lácteo panameño y en contradictorios comunicados al MIDA y a productores, refirió períodos diferentes de permanencia del recorte, e incluso, que los motivos eran por no ganar la licitación en el programa gubernamental Un vaso de leche, aseveró la fuente.
Según la empresa láctea, 'variaciones en la demanda agregada los obliga a activar un plan de contingencia que contempla la reducción temporal del 10 por ciento del acopio de leche grado A', mientras que anteriormente informó de un excedente de 550 mil litros del alimento desde el 2017 hasta la fecha.
Reportes de prensa alertaron de 'importación desmedida' durante 2016 y primer semestre de 2017, que desencadenó un 30 por ciento de excedentes en la industria nacional, motivado por una baja en cotizaciones internacionales, que no se reflejó en el consumidor.
En establecimientos capitalinos actualmente se exhiben ofertas minoristas de leche fluida de la marca Estrella Azul, con cerca del 30 por ciento por debajo de precios del mercado local, pero aun así no ocasionaron el impacto esperado en los consumidores, según constató Prensa Latina.
En febrero pasado, rumores que circularon en redes sociales acerca de la calidad de las mercancías de la firma fueron desmentidos en un comunicado corporativo, en el cual reafirmó el tratamiento de los lácteos para eliminar presencia de elementos extraños que afecten la salud humana.
Panamá produce 188,8 millones de litros de leche al año, e importa otros 152 millones, por lo que el per cápita de consumo, de aproximadamente 85 litros anuales, es uno de los más bajos del continente.
Desde 1995 una ley estableció el programa escolar Un vaso de leche para combatir la desnutrición, el cual se retomó recientemente con la calidad requerida, porque antes se sustituyó por una bebida láctea, informó el Ministerio de Educación.