El ganadero español, Ángel Santiago García, ha puesto en marcha una novedosa tecnología, que permite a las vacas avisar por teléfono móvil cuando entran en celo o cuando van a dar a luz.
19 marzo 2016 |
Dicha tecnología importada de Francia y desarrollada por los informáticos de la Universidad de Salamanca, permite ahorrar mucho dinero dado que al controlar el celo de la novilla los ganaderos no gastan en semen —cuya dosis cuesta al menos 50 euros— para inseminación.
En el primer mes, el sensor crea un patrón de movimiento del animal para diferenciar los días en los que está en celo. De esta manera, el sensor del collar de la vaca envía los datos vía «wifi» a una estación local creada en la propia finca y desde ahí se mandan al móvil del ganadero mediante una aplicación desarrollada para teléfonos «smartphone».
El ganadero recibe un mensaje en su móvil el día en que el animal entra en celo y, así, «sabemos con exactitud el día que acaba el celo, ya que la inseminación hay que hacerla justo a celo pasado, que es el momento óptimo».
Aunque esta aplicación se desarrolló hace algunos meses en ganaderías de intensivo (estabuladas) de Francia, «es la primera vez que se pone en marcha con animales sueltos por el campo, en régimen extensivo», aclara Ángel Santiago.
Otra novedad que también se ha puesto en marcha son los termómetros vaginales. Dicho termómetro se coloca quince días antes del parto y mediante una aplicación móvil informa al ganadero sobre la temperatura corporal del animal.
“Cuando hay una bajada considerable de temperatura, la aplicación te avisa de que el parto tendrá lugar en 48 horas, y, cuando el termómetro es expulsado te llega un mensaje advirtiendo de que animal va a parir en una hora”, explica el ganadero.