El Consejo de Estado suspendió el pasado 6 de mayo las autorizaciones para la aplicación aérea de plaguicidas en toda Francia. La batalla legal se libró a partir de un reclamo legal de ambientalistas
16 mayo 2014 |
En el Caribe francés, donde se cultivan intensamente plátanos, las ONGs lucharon durante años para evitar que los aviones fumiguen sobre sus cabezas. "Afectada por los agrotóxicos, la gente no podía soportar ver a las islas salpicadas de pesticidas todo el año, en contra de la salud de las personas y de la excepcional biodiversidad del Caribe" –dice la nota de Martin.
Desde 2012 se habían presentado exitosos recursos ante los Tribunales de la isla de Guadalupe, pero las excepciones ministeriales continuaron; Martinica también fue gravemente afectada por fungicidas. La fumigación aérea no ocurrirá tampoco en los demás departamentos franceses, como en Borgoña , donde los conservacionistas y ONGs a favor de la salud pública también lucharon en contra de esta práctica. Esta es una gran victoria para la sociedad civil –reiteraron.