Los glaciares en el monte Qomolangma, conocido en Occidente como Everest, se han contraído un 10 por ciento en los últimos 40 años debido al calentamiento global, dijo Kang Shichang, investigador del Instituto de Investigación de la Meseta Tibetana de la Academia de Ciencias de China
26 abril 2014 |
Los glaciares son muy sensibles al cambio climático, por lo que pueden servir de monitores, agregó.
El cambio climático ha tenido su impacto en la meseta, que es la más alta del mundo.
Kang dijo que los glaciares empezaron a contraerse desde el siglo XX y que este fenómeno se aceleró a partir de la década de los 90 del siglo pasado. En comparación con hace 20 años, el bosque de seracs está a una mayor altitud y los glaciares sufren más y mayores grietas, según contó el investigador.
Kang aseguró que los glaciares en la meseta son recursos acuáticos suplementarios de muchos ríos y lagos en el continente y que la contracción reducirá los flujos de agua en los cursos inferiores.