La influencia humana en el cambio climático se remonta a la década de 1860, en función de la diferencia de temperatura entre el verano y el invierno, concluyó un estudio publicado hoy por la revista Nature Sustainability.
05 mayo 2019 |
Los especialistas explican que el cambio climático antropogénico generalmente se centra en el aumento de la temperatura del aire en la superficie, a saber, el calentamiento global y el aumento de los climas extremos.
Según los investigadores, la amplitud de las fluctuaciones estacionales de la temperatura disminuyó ampliamente y esta tendencia se remonta a finales del siglo XIX.
El descubrimiento asegura que la estacionalidad de la temperatura había sido estable hasta la década de 1860, a partir de la cual ha habido continuas tendencias descendentes en las latitudes medias-altas del hemisferio norte.
De acuerdo con un análisis formal de detección y atribución con las últimas simulaciones de modelos climáticos, el incremento de las concentraciones de gases de efecto invernadero y los aerosoles antropogénicos son los principales contribuyentes a las tendencias a la baja observadas.