Expertos nacionales aseguran que Panamá resulta hoy uno de los referentes de calidad a nivel internacional en los cafés especiales.
20 mayo 2019 |
A juicio de algunos miembros del jurado, los productores panameños presentaron innovaciones en calidad, al implementar la preparación de lotes con nuevos procesos que dejaron sorprendidos a los árbitros nacionales.
Fue una intensa jornada de cinco días, donde los 18 jueces compartieron sus experiencias con cada una de las mesas catadas, donde quedaron impresionados por la calidad del grano; pero, sobre todo, por las características de los lotes en la categoría de Geishas, Tradicionales y Pacamaras con procesos, precisó Garrido.
Por su parte, Moisés Montezuma, quien funge como juez nacional hace cuatros años, reconoció que en el certamen se presentaron cafés que alcanzaron altísimos puntajes, en especial el Geisha, 'con notas frutales que no se pueden describir, pero resultaron sabrosos y ricos'.
Durante la cata encontré tasas que nunca había probado en mi vida como trabajador en la industria del café de altísima calidad, acotó.
Mientras, Juan Gregorio Phillips, el árbitro más joven de la competencia con solo 17 años, dijo que en su primera experiencia encontró cafés muy florales, con buenos cuerpos y de excelente calidad.
Durante la competencia nacional, que concluyó el viernes, fueron seleccionados 78 lotes que participarán en la XXIII Cata Internacional, la cual inicia el miércoles en Valle Escondido Boquete, en la occidental provincia de Chiriquí, con la participación de 22 jueces procedentes de ocho países de Asia, Europa, América y Australia.
Dentro de cada muestra, los expertos evalúan muchos factores asociados a características básicas como el aroma de la bebida antes de prepararla y después de echarle agua caliente, acidez, cuerpo, fragancia, uniformidad, dulzura, limpieza de la tasa y el resabio que deja la bebida en el paladar.
En 2018, Panamá marcó un récord mundial al vender la libra del lote de café Geisha de mayor puntaje a 803 dólares, de ahí que este año los ojos de la caficultura de altísima calidad estén puestos en esta competencia internacional, que según sus organizadores marca un referente en calidad y precio.